EL NIÑO SAGITARIO

     Para los Sagitario el calendario no importa. No crecen jamás. Los niños Sagitario son alegres y juguetones payasos en miniatura, que cuando se sienten rechazados ríen con los ojos llenos de lágrimas. Hasta los bebés exhiben su carácter alegre y su deseo de camaradería. El niño Júpiter llorará si le dejas solo, pero lleva la cuna a la sala de estar donde los adultos conversan, y se dormirá tranquilamente. Sus sueños serán tanto más gratos cuanto más acogedora y familiar sea la atmósfera de amor y felicidad en que crezca. Más adelante se desprenderá bastante de los vínculos familiares, pero mientras sea pequeño necesitará la seguridad del olor humano, de verlos y oirlos. Si se le niega esta forma de íntimo contacto humano, se retraerá en si mismo y puede volverse un tanto sarcástico. Además, se buscará un sustituto. Puede ser un almohadón suave, que pueda abrazar, o un osito de felpa, sin orejas y sin nariz, pero para él representa la seguridad, aunque te habría preferido a ti.
     Los varones Sagitario ponen de manifiesto su naturaleza confiada y feliz yéndose a pasear al bosque con una caña de pescar de fabricación casera y una lata de lombrices, descalzos, silbando alegremente, dispuestos a charlar con quien encuentren y acompañados por su perro. De pequeño, Sagitario es informal, y jamás deja del todo de serlo. Las niñas de Júpiter suelen pasar por una época en que les encantan los juegos de varones. Los de este signo son chicos que tienen sus propias ideas. Lo primero es la sinceridad. Desnuda, sin ornamentos, brutal. La refinan hasta hacer de ella un arte, y lo mismo esperan de ti, o bien se negarán a convertirse en dóciles esclavos que obedecen mansamente todos los caprichos de los padres.
     Tu autoridad la obedecerá sin resistencia, si se convence de que hay lógica en tus órdenes, que deben pasar primero por el tamiz de su mente inquisitiva y razonable; si no sales con buenas notas de la prueba, te darán de lado. Y ahí te quedarás, agitando amenazante tu autoridad, y ahí seguirá él agitando a su vez, desafiante, su sinceridad. Si eres justo y procuras ser tan sincero como él, un niño Sagitario aprenderá a respetar tus normas. Cuando sepas que estás en lo cierto, tendrás que ser firme y darle buenas y sólidas razones. Cuando te equivoques, tendrás que admitir tu error y salvar la situación con una honrada confesión de tu propia estupidez.
     La curiosidad de Sagitario es infinita. Empieza el dia con una pregunta y cuando se queda dormido tiene una pregunta en los labios. Cuando son muy pequeños y apenas si están aprendiendo a hablar y a explorar el ancho mundo, preguntarán cosas como: ¿Por qué no debo tocar la estufa?, ¿por qué los caramelos me estropean los dientes?, ¿es cierto que las zanahorias rizan el pelo?, ¿como es que los Reyes Magos necesitan cartas si son mágicos? Durante el almuerzo, durante la siesta, durante la cena, las preguntas zumban como moscardones.
     Como verás, la mayoría de las preguntas de los niños Sagitario van dirigidas a pinchar el globo de la hipocresía adulta, o de la presunción, cuando no la mala fe lisa y llana, de los mayores.
     Más tarde, cuando los pequeños Sagitarios sean ya mayores, las preguntas serán: ¿Por qué tengo que regresar a una hora determinada, si tú dices que tienes confianza en mí? ¿Por qué te preocupa lo que piense la gente? ¿Es que la gente te importa más que yo? Ahí tienes una pegunta difícil; mejor que vayas practicando la respuesta mientras le cambias los pañales. Un adolescente Sagitario no aceptará sin más tus reglas, si la base de ellas es la convivencia social más que tu preocupación por su bienestar.
     El antiguo refrán según el cual cuando los hijos son pequeños te pisan los pies, pero cuando son mayores te pisan el corazón debió haber sido escrito pensando en Sagitario. Es innegable que son niños desmañados, y a veces sencillamente torpes. Cuando crezca, su necesidad de libertad es tan intensa que incluye también la liberación de las ataduras familiares, y estos niños pueden irse de casa con extraordinaria precocidad, y a veces, pasar largas temporadas sin telefonear ni escribir. Eso puede causar algunas puntadas en la región del esternón. Si eres prejuicioso y estrecho de miras, es osible que nole veas más que los días de fiesta... si tienes suerte. Pero si evitas medir a sus amigos con otro baremo que no sea el de su auténtico valor, y si le  has demostrado que tienes fe en su honradez y en sus sueños, tu hijo volverá a casa a renovar su amor. De otra manera, se quedará por ahí con su frazada o su almohadón o su osito de felpa, representados ahora por amigos que le aceptan tal como es y que tienen fe en él.
     Prepárate para que el romance asome desde muy temprano su rizada cabeza. Con las chicas, probablemente no será grave; si gracias a una adecuada actitud de los padres no necesitan convertir esas primeras salidas con el sexo opuesto en el osito de la seguridad, no se tratará más que de los primeros ensayos de su feminidad. En cuanto a los chicos, es posible que necesiten algunas clases especiales sobre el tema de los pájaros y las abejas; más vale prevenir que curar.
     También tendrás que enseñarles a economizar, porque los niños Sagitario gastan el dinero como si fuera papel, puesto que ya han descubierto que lo es. Tienen que aprender que cuando han gastado lo que tenían, ya no hay más; no les ayudes a tapar agujeros.
     A los de ambos sexos les gustará, probablemente, ir a la escuela. Su inteligencia polifacética y su gran curiosidad harán del aprendizaje un juego fascinante, si una rutina demasiado opaca y aburrida, y un exceso de insistencia en normas estrictas y hábitos de estudio demasiado rígidos no acaban agotando su innata inquietud. Cuanto más progresista sea la educación que se les imparta, mejores alumnos serán los pequeños Arqueros, y con más placer estudiarán. Son inquietos, y si se les obliga a estar continuamente sentados o a refrenar su fantasiosa imaginación  no tardarán en perder todo incentivo y -triste es decirlo- a veces de manera permanente. Si sus maestros son severos e intolerantes, o si son víctimas de sistemas de enseñanza pobres en imaginación, los niños Sagitario tienden a dejar la escuela para comenzar a trabajar.
     El sistema de distinciones da buenos resultados con los jóvenes Arqueros. Si se tiene confianza en él, un niño de Júpiter jamás recurrirá a ninguna forma de engaño; en caso contrario, puede llegar a la conclusión de que eso no tiene importancia. Si nadie cree en él, ¿para qué esforzarse?
     Les atrae la idea de correr mundo y la ocasión de poner en práctica su idealismo. Luchar por una causa les permite desarrollar sus fuerzas. Un joven Sagitario sin una causa por la que luchar puede atacar una ideología con un fervor y un fanatismo tales que dañe irreparablemente su futuro.
     Lleva los ojos confiadamente fijos en las estrellas, y puede ser que sufra unos cuantos tropezones por el camino, a fuerza de no advertir las rocas que se interponen en su trayecto. El pequeño Arquero es sincero e independiente; dale lugar suficiente para que practique y se ejercite con su arco. Necesita sentir la hierba  bajo los pies desnudos, recibir la lluvia en la cara y asar sus sueños en los brillantes y cálidos rayos del sol hasta que estén perfectamente a punto. Ahí está, agitando como un pañuelo su corazón joven y optimista, para saludarte. Devuélvele el saludo agitando tu alegre confianza en él 

EL NIÑO ESCORPION

     La reacción habitual de los orgullosos padres al ver por primera vez al pequeño Escorpión recién nacido es una grata sorpresa. ¨Tiene un aspecto más acabado que los demás bebés que hay en la nursery", murmuran. "Y es más tranquilo también... y fíjate qué cuerpecito tan fuerte tiene.¨
     Comprale un parque, grande y resistente, que lo necesitarás. Podrás meterte en él para leer un libro o para comer en paz, tras la seguridad de los barrotes. Tan pronto sea capaz de enfocar sus ojos, el bebe Escorpión te inmovilizará, e hipnotizándote te hará obedecer todos sus caprichos.
     Tendrás un trabajo bien a tu medida, pero también un desafío interesante. Un niño Escorpión necesitará una disciplina firme y constante. Tendrás que enseñarle a ser considerado con los débiles, a saber perder, a respetar la autoridad y a perdonar cuando alguien le hiera. Mientras se vaya formando su bello carácter, te verás tú misma impresionada por su mentalidad brillante y por el magnetismo de su personalidad. Bien vale la pena estimular ese coraje y esa honradez excepcionales, y protegerlos de la influencia de un superyó capaz de pervertirlos o de destruirlos.
     Escorpión puede elegir dos caminos: el de elevarse hacia lo alto y el de sumergirse en lo bajo. Las madres indecisas, nerviosas o blandas tienen la batalla perdida antes de librarla. Cuando apenas haga pinitos, el pequeño Escorpión te mirará echando chispas cuando le prohíbas que toque algo. Mírale tú también fijamente, bondadosamente pero con firmeza. No habrás ganado más que una batalla, porque la pelea se reiniciará una hora después, pero es un paso adelante en tu largo camino. Finalmente el pequeño Escorpión empezará a admirarte por la fuerza con que le resistes. Naturalmente, sabe que la victoria de los otros no se debe más que al tamaño actual de él, y que algún día te vencerá, pero mientras tú o el padre seáis más grandes os respetará a regañadientes. No olvides que tu firme disciplina tenga un generoso complemento de amor y afecto, porque si no tu hijo podría convertirse en una lamentable Lagartija Gris, torturada por miedos y fobias, amarga y retraída.
     Con su modalidad desenfadada y a veces sarcástica en el habla y en los modales, tu hijo parecerá franco y directo, pero no por eso será menor su necesidad de intimidad; tiene sus pequeños secretos, en los que no debes entremeterte. Dale un estuche grande de metal, con llave, donde pueda guardar sus cosas personales, o un cajón especial para él solo, que por estricto acuerdo nadie más de la familia tenga derecho a abrir.
     Son niños que ocultarán su pensamiento, pero a ellos será imposible esconderles nada. Descubrirán todos los secretos vergonzosos de la familia, desde los dientes postizos de la tía Berta y las ocasionales borracheras del primo Andrés hasta el postizo con que papá disimula la calvicie. También son expertos en localizar calcetines, llaves, billeteras y lápices para labios perdidos, como detectives en miniatura que para resolver cualquier misterio se valieran en partes iguales de la fría lógica y de la brujería.
     Tu pequeño Escorpión es más sabio de lo que cabe esperar de su edad, y en ocasiones su comprensión instintiva resultará una bendición. Será fácil que un papá desalentado por sus problemas económicos se encuentre  bajo la sorprendente presión del abrazo de un niño indudablemente muy pequeño para saber nada de economía. Pero sabe que su padre está preocupado y quiere expresar su deseo de destruir lo que  causa su inquitud. También una madre que se siente mal o esté deprimida puede  recibir la caricia silenciosa y tierna de un minúsculo Escorpión que de alguna manera ha sabido percibir su tristeza.
     Los niños Escorpión exhiben una lealtad sin límites hacia los amigos y los  seres amados, pero con el resto del mundo pueden ser bastante duros. Si un compañero de mal genio le rompe deliberadamente el caballo-mecedor, es posible que el pequeño Escorpión le rompa a su vez el triciclo, el camión de bomberos y el encerado, además de darle un golpe en la nariz para que no le queden dudas de que le pisó la cola a un Escorpión. Claro que hay que combatir  esas actitudes. Tú podrás decirle a tu hijo Escorpión que la cólera hay que consultarla con la almohada, que con ese tipo de venganzas se hace daño a sí mismo, pero para él esos razonamientos no serán muy lógicos. Cómprale un bumerang y déjale que lo lance con todas sus fuerzas, que quizás cuando lo haya sorprendido al volver unas cuantas veces a golpearle la oreja entienda el mensaje. Claro que el juguete no le gustará tanto como un microscopio, un libro de juegos de magia o un equipo de química; con esos haráss blanco seguro.
     Los niños y niñas Escorpión tienen una mentalidad aguda y penetrante y una impresionante capacidad para captar cosas abstractas. Si tienen la buena suerte de dar con maestros avisados, aprenderán pronto a leer y serán líderes de las actividades escolares.
     Si se le aparta de su fascinación por lo prohibido, un niño Escorpión tiene grandes probabilidades de ser quien diga el discurso de despedida del año escolar. Haz que se mantenga físicamente activo y mentalmente interesado, canalizando su apasionada curiosidad hacia la ciencia, la literatura, la medicina o el deporte. Estimula sus sueños infantiles de ser ingeniero espacial, marino, bombero, ministro, animador de espectáculos e incluso presidente. Jamás trates de imponerle tu propia idea de la profesión adecuada; sería la perfecta manera de enviarlo por el camino bajo, el que lleva a peligrosos experimentos por los callejones más oscuros de la vida. El sabe exactamente lo que quiere, e imponerle tu voluntad es un grave error. Sé leal con él y jamás faltes a tu palabra ni rompas una promesa.
     Escorpión necesita oportunidades de liberar su gigantesca reserva de energía acumulada, porque exteriormente parece más tranquilo y relajado de lo que es en realidad. Las explosiones de nervios, discusiones a la hora de las comidas y disputas familiares en el momento de acostarse le producirán pesadillas, y son sumamente nocivas para su salud mental y física. Es un niño que tiene que enfrentar pasiones intensas y bullentes emociones, y lograr el dominio de su naturaleza es para él una ruda tarea, pero si cuenta con una dirección adecuada lo conseguirá  muy bien. Las reprimendas ásperas e impremeditadas, sin explicación lógica alguna, son tan desastrosas como una tolerancia sin límites.
     Le encantan las fiestas populares, las películas de terror en la TV, la ciencia ficción y las historias de fantasmas. También se mostrará aficionado al sexo opuesto. No te escandalices si encuentras a tu hijo Escorpión, a los cinco años, haciéndole guiños con los ojos a la rubita que vive en la casa de al lado. Algún dia será el Amante, con mayúscula, sin que tú puedas impedirlo. Pero sí puedes impedir algunas tragedias románticas futuras, enseñando a los adolescentes de ambos sexos la importancia de la responsabilidad en los asuntos del corazón. Escorpión respeta profundamente el círculo familiar, y si le explicas que un comportamiento romántico desaprensivo lo destruye, te escuchará.
     No importa lo que llegue a ser; en el campo que elija, será el mejor. Los jóvenes Escorpión tienen la determinación suficiente para conseguir lo que quieren y la fuerza necesaria para conservarlo. Pero que su autosuficiencia no te impida ofrecerle tu apoyo; lo necesita, aunque parezca burlarse de la aprobación ajena. Tendrás que ayudarle a encontrar una meta digna en función de la cual pueda orientar la pasiones interiores que amenazan consumirle. Tienes una criatura extraña, hechizada, a quien espera tal vez un destino importante y que tendrá que recorrer muchos kilómetros para alcanzarlo. Marcha a su lado mientras él te necesite y después déjale que siga solo; ya volverá, sano y salvo, con el trofeo que ambiciona. Plutón le da valor, fuerza e inteligencia, pero a ti te corresponde ofrecerle lo que más necesita: un ejemplo diario de lo que es amar y de cómo, a su vez, ser amado. 

EL NIÑO LIBRA

     El pequeño Libra parece un ángel rosado y regordete, sacado de las paginas de un libro de cuentos. Con su expresión dulce, y esos gratos rasgos venusinos, tan bien equilibrados, es encantador. Rara vez ocurrirá que, furioso y con la cara congestionada, chille y patale en su cuna, o que aplique a mami un golpe en la nariz mientras ella procura darle el biberón. Cuando sonríe, toda la guardería se ilumina. "¡ Pero, qué encanto de bebé, tan bueno! Tan tranquilo, regordete y lleno de hoyuelos. Seguramente un hada madrina lo bendijo con su mágico beso."
    Fijate si tiene un hoyuelo en el mentón, como la mayoría de bebés de Libra, y piensa lo que solia de decir la abuela: " Mentón con hoyuelo, diablo cojuelo"
     Es posible que sea alguna mañana mientras él está sentado a la mesa, removiendo lentamente con la cuchara un plato primero, después el otro. Los dos se estan enfriando sin que él haya probado bocado ¿No tendrá apetito? Sí, se muere de hambre. ¿Tendrá fiebre? No, está perfectamente. ¿Está enojado por algo? No, de ningún modo. Entonces, ¿por qué sigue ahí inmovil y obstinado, jugando de esa manera con la cuchara y sin probar bocado?
     Porque no acaba de decidirse sobre que plato comerse primero. Y tú aumentaste la confusión al darle un vaso de zumo y una tostada, intentando tentarle. Fue un error. Ahora, será imposible que llegue a decidirse. Mejor que, por hoy, te olvides del desayuno. Y mañana por la mañana, dale una cosa cada vez. Acabas de aprender la lección más importante que hay que saber sobre tu niño Libra: nunca le hagas elegir, pues es incapaz de tomar decisiones.
     Si hay algo que un niño Libra detesta más que tomar una decisión, es tener que tomarla de prisa. No le acoses. Supongamos que aprendió a vestirse solo y, con la emoción de semejante aventura, hace algunas semanas tiene olvidada su indecisión típica. Ahora, vestirse ya es cosa sabida para él. Tú empiezas, ayudándole a ponerse los pantalones, y le alcanzas la camisa, los zapatos y los calcetines. Se queda ahí sentado. "¡Vistete!" Sigue ahí sentado. "¡Date prisa y vistete!".
     En la escena siguiente, tú apareces contándole a alguna amiga lo terco que es tu hijo Libra. No seas injusta. Lo que pasa que tú tratas de hacer que decida de prisa qué calcetín ponerse primero en qué pie. Ya la cosa es de suyo bastante difícil, pero cuando él acababa de decidir que se pondría en el pie derecho el calcetín que tiene en la mano izquierda, tú le gritaste y alteraste su equilibrio; ahora está de nuevo en el punto de partida. ¿ Qué calcetín primero? Ya ves que la culpa es tuya, no de él. ¿Cómo puede tomar una decisión tan importante, si continuamente le gritan y le dan ór
denes?
     Son las cosas que pueden ponerte un poco alterada, especialmente si eres de tipo nervioso, y no serás la única. Algún día, él se habrá enamorado de una muchacha maravillosa, y estarán hablando de matrimonio. De cuando y si. Él se queda ahí sentado. ¿Si? ¿O no? La chica espera, pacientemente. Los rasgos de él tendran la misma expresión perpleja que tienen ahora. Por último: "Jorge, ¿vamos a casarnos?". Sigue sentado. De nuevo: "Jorge, ¿cuando nos casamos?". Pobre chica. El mismo error que cometiste tú con el desayuno. Ahora, él tiene que decidir dos cosas: no sólo si se casan, sino cuándo.
     Pero para eso faltan unos cuantos años. Hoy el problema son los zapatos y los calcetines. Ve hacia donde está y dile con firmeza: "primero vamos a poner este calcetín en este pie". Díselo con suavidad, sin gritos ni tono áspero. De un golpe has superado dos obstáculos: le ayudaste a decidir y creaste una atmósfera agradable. En cinco minutos estará vestido. Si tú le enseñas a decidirse, sin acosarle ni darle prisa, será mejor para la chica también. Para entonces, tu hijo Libra habrá superado su indecisión.
     Los niños Libra cuyos padres han alterado su delicado equilibrio insistiendo constantemente en que se decidan con demasiada rapidez suelen tener de adultos una verdadera neurosis con las elecciones. Sugiérele con suavidad una solución, una y otra vez. Terminará por encontrarle la vuelta, y le habrás ayudado a vencer una de sus mayores dificultades. Muéstrale como se hace. Eso es todo. Aunque pueda parecer obstinado, no hace más que reaccionar según la modalidad típica de Libra ante una interrupción discordante y ante el trauma emocional que significa el hecho de que no se respete su momento de decisión. A él le gustaria conformarte, en serio, pero sólo puede ser eficiente cuando en su mundo hay armonía de sonido, color y pensamiento. La tensión le desquicia. Cuando  los adultos apresurados meten a la fuerza una personalidad joven en un molde que no le corresponde, pueden deformarla para siempre.
     Te será útil tener presentee la razón que explica las vacilaciones de tu hijo. La mente de los niñoss Libra está hecha para buscar la verdad. Son niños y niñas de buen corazón, y deseosos de ser imparciales. A tu pequeño le espanta la idea de cometer un error o equivocarse en un juicio. No quiere herir tus sentimientos, pero su naturaleza le obliga a buscar una respuesta equilibrada antes de decidirse a hacer las cosas de una manera atropellada
     Los tonos chocantes y chillones en su habitación pueden provocar constantes altibajos en su equilibrio emocional. Todos los matices del azul y los tonos pastel le calmarán eficazmente. Ponle música, pero suave, cuando quieras que coma, que se vista o que guarde los juguetes. Si los sonidos y los colores que rodean a un niño Libra son discordantes, sus acciones también lo serán. Verse obligado a ser testigo de cualquier forma de violencia puede hacer que algo muy profundo de él quede destruido para siempre. Los niños Libra necesitan paz, silencio y descanso en grandes dosis.
     Son niños que juegan mucho y durante mucho tiempo, y después deben descansar. El ritmo de libra le exige períodos de actividad seguidos de otros de reposo; es la única forma en que puede mantener su salud emocional y física. Si se le hace sentir culpable por esta característica, entonces, como autodefensa se volverá un holgazán. Cuando veas a un niño Libra sin hacer nada, no le molestes. Su balanza interna pronto se habrá eequilibrado y le veráss listo para la acción. Ahora está volviendo a cargar las baterías.
     Los niños Libra son expertos en ablandar corazones. Tienen una forma de ser tan encantadora, son tan dulces sus zalamerías, y ¿quién podría resistirse a esas sonrisass y esos hoyuelos? Sus modales dulces y cariñosos pueden convertir a sus padres en dos genios benévolos que le conceden hasta el último de sus deseos. La consecuencia es que estos niños pueden llegar a la escuela tan malcriados que son poco menos que imposibles de manejar. Lo que necesitan los niños Libra no es tanto disciplina como estar menos mimados.
     Si se le ha educado con el adecuado equilibrio, el niño típico Libra es una delicia para los maestros. De mentalidad brillante y lógica, les gusta la discusión, y su intensa curiosidad hace de ellos buenos estudiantes. Sin embargo, una vez que aprendan a leer y a manejarse con hechos, tanto padres como maestros se verán enfrentados a discusiones constantes.
     Jamás da resultado decir lisa y llanamente algo a un niño de este signo. Si no le presentas los dos aspectos del problema, pensarán que eres injusto. Y si das preferencia a uno, tu alumno Libra hará una cuestión de honor defender el otro, hasta que te obligue a ser imparcial. Si tu parcialidad es por el blanco, Libra saldrá siempre en defensa del negro, con lo que se puede ganar la reputación de rebelde, aunque nada está más lejos de la verdad. Son niños que obedecerán escrupulosamente las reglas, siempre que esten convencidos de que las reglas no son una estupidez. La balanza debe estar siempre en equilibrio, para que Libra no se sienta incómodamente sacudido; por eso discutirá hasta que tenga la sensación de haber considerado honradamente todas las circunstancias, y de que la balanza de la justicia está armoniosamente nivelada. Los niños y niñas Libra siempre pondrán a prueba el ingenio de padres y maestros, porque hay que saber pensar con mucha lógica para mantenerse a su altura. Lo discutirán todo, desde los titulares de un periódico hasta quién tiene razón o no la tiene en un desacuerdo familiar. A un niño Libra no le gustará oír habladurías de los mayores. Para él una confidencia es sagrada, y también le hará fruncir el ceño ver que se juzga apresuradamente a alguien. Si cree que tú estás eequivocado, tomará partido por el otro, aunque se trate de tu peor enemigo.
     Jamás invadas su intimidad, que él no invadirá la tuya. Haz que las comidas sean placenteras.
     Una bendición con los niños Libra es que, si no se han refugiado en el resentimiento, debido a una torpeza ajena, serán generalmente limpios y pulcros sin que haya que vigilarlos. A la mayoria de ellos les disgusta tanto el desorden que ayudarán de buena gana a mantener pulcra la casa. Como Libra tiene talento musical y artístico, podría ser que tuvierás en la familía un compositor o artista, de manera que encárgate de que no le falten oportunidades para desarrollar su capacidad latente.
      Los adolescentes de ambos sexos tendrán la casa envuelta en una constante nube de romance, y los amores juveniles serán tantos que tendrás la sensación de vivir en una especie de campamento sentimental, pero también eso pasará. Algún dia se casará y constituirá una hermosa familia: tranquila, equilibrada, armoniosa y discutidora.



EL NIÑO VIRGO

     En su intento de imitar los ruidos que oye en la cuna, el diminuto bebé Virgo muestra ya el germen del raras veces mencionado talento histriónico de su signo. La capacidad para la mímica se manifiesta ya casi desde nacimiento. El bebé Virgo es vivaz y activo, y al mismo tiempo, más pacífico y tranquilo que otros niños: una contradicción que presagia su personalidad futura, alternativamente sedante e irritante.
     No trates de darle puré de manzanas a tu pequeño Virgo cuando él quiera melocotones, porque la batalla sera larga. Terminarás limpiando el pure de manzanas de toda la sillita alta, sin que un gramo haya ido a parar al estómago del bebé, por encantadora que sea su sonrisa mientras firmemente aparta la cabeza. Es posible que te sorprenda ver que prefiere las espinacas a los helados, pero es que la meticulosa selectividad de Virgo con la comida se manifiesta desde muy pronto.
     Aparte de ser quisquillosos con la comida, y tener de vez en cuando molestas indigestiones, los niños Virgo son un encanto para criarlos: pocos conflictivos y raras pataletas. Ya desde que son muy pequeños muestran tendencia a la pulcritud y guardan de buena gana sus juguetes. Tu niño Virgo puede mostrarse vergonzoso y callado cuando hay mucha gente, pero en familia y entre amigos comprobarás que seguramente el gato no le ha comido la lengua. Es probable que sea precoz para hablar y que lo haga con fluidez, salvo en presencia de extraños. Un niño Virgo rara vez trae problemas, y para mamá es un compañero maravilloso mientras se ocupa de la casa. Estará encantado de imitar lo que ella haga y por lo general obedecerá la primera vez que le digas algo, sin que sea necesario reñirle.
     En la escuela, son los que con más facilidad aceptan la disciplina y los que con más dedicación estudian sus lecciones. Es una delicia enseñar al niño típico de este signo, despierto y de modales dulces, pero hay que ser mesurado con las críticas. Insistir demasiado en los errores le llevará a preocuparse demasiado, a veces hasta el punto de enfermarse.
     Un sermón delante de sus compañeros puede mortificarle dolorosamente y sofocar durante largo tiempo su deseo de aprender. Si cometen un error, los niños Virgo sólo necesitan una advertencia, hecha con calma, para preocuparse tanto como el maestro por corregirlo, y más tal vez.
     Es frecuente que las obligaciones mundanas que disgustan al resto de la clase sean aceptadas por Virgo como importantes responsabilidades. Son niños eficientes y dignos de confianza, de disposición grave, aunque amistosa y placentera, y lo bastante sensibles como para mostrarse irritables si sus compañeros más extrovertidos hacen burla de ellos. El niño Virgo es muy aceptable, y probablemente tan capaz de pintar un decorado para el teatro como de dirigir el periódico de la escuela.
     La honradez de Virgo, unida a la cuidadosa atención que pone en los detalles, hacen que recurrir a estos niños sea la mejor elección para un maestro ocupado que necesita ayuda para corregir pruebas. Habrá ocasiones en que el maestro se ruborice cuando, al oírle hacer una afirmación errónea, el normalmente tímido y silencioso Virgo levante la mano para señalar en términos inequívocos el error. Los alumnos Virgo quieren hechos, y quieren saber los porqués. Rara vez pondran en questión la autoridad, pero sí lo harán con el conocimiento libresco, a menos que sepan en qué se basa. Son niños que necesitan muchos juguetes educativos, y mientras son pequeños es menester leerles con toda la frecuencia posible. Si no se les proporciona una educación cabal, terminarán siendo desdichados e inadaptados de adultos. Saber menos que otros les convierte en irritables introvertidos, dolorosamente avergonzados de su insuficiencia.
     Es mejor no hacer caso de los adolescentes Virgo cuando empiezan a prestar atención al sexo opuesto. Burlarse de una niña que experimenta su primer amor puede dejarle cicatrices emocionales permanentes, y entremeterse en los escarceos de un chico Virgo. No aceptan con facilidad las relaciones que puedan conducirle al matrimonio y hay que despejarle el camino tanto como sea posible.
     Tendrás que ser tú quien abasteza con signos físicos de afecto las necesidades emocionales de tu hijo Virgo; son personas que jamás te dejarán ver cuán honradamente desean esa forma de amor, pero la carencia de ella afectará en enome media a sus relaciones futuras. Hasta la niñas más hermosas y más despiertas necesitan que les digan reiteradamente que son interesantes, porque se les hace difícil creer que su modalidad modesta y retraída pueda ser tan atractiva como las personalidades más agresivas de sus amigos. La personalidad de Virgo puede soportar cualquier cantidad de elogios sin creérselos, de modo que no seáis avaros con los abrazos, besos, abrazos sinceros y palmadas en la espalda. Vuestro hijo Virgo necesita grandes dosis diarias de esas vitaminas emocionales.
     Será de hábitos muy precisos, y se quejará si tocan sus cosas o invaden su intimidad. Hace ciertas cosas en ciertos momentos y, si su horario personal se altera, Virgo se alterará también. Puede ser arriesgado pedirle una opinión franca, pero aparte de eso, su compañia es habitualmente muy grata. Es un niño que criticará hasta el último miembro de la familia, con imitaciones a veces divertidas, pero implacables, de sus respectivos defectos. Es probable que desde pequeño quiera tener un cuarto para él solo, y que sea quisquilloso con tus habilidades culinarias. En cambio demostrará un excelente sentido de la responsabilidad mucho antes de la edad en que otros niños aprenden el alfabeto. Puedes esperar que se esfuerce para obtener buenas notas en la escuela, que te ayude de buen grado en las tareas de la casa y que administre con cuidado su administración semanal.
     Será bueno que tenga un gatito u otro animal, de modo que pueda aprender callada las lecciones de amor. No le compres un San Bernardo, que si es un niño típico del signo, preferirá los animalitos más pequeños. Un hormiguero puede parecerle fascinante. para su mente curiosa y práctica.
     Escúchale cuando hable, que su sabiduría va más allá de sus años. Recuerda que su imaginación necesita mucho estímulo y amplio espacio para crecer; si no, es muy fácil que se ahogue. No es necesario que te preocupes por no malcriarlo o crearle demasiadas ilusiones; los niños Virgo no corren ese peligro.
     Dale todos los sueños más dulces que puedas para que los atesore en corazón. Esos deliciosos momentos de fantasía serán la seguridad, cuando crezca,  del necesario equilibrio emocional. Y asegúrate de que, en secreto, tenga su estrella para expresarle sus deseos. Los recuerdos de esas mágicas ensoñaciones serán su refugio contra la soledad en los años venideros, y Virgo tendrá muchas ocasiones de soledad. A diferencia de otros niño, es probable que no le gusten mucho los cuentos de hadas y las ficciones. Es un pequeño realista, y tal vez por eso mismo es quien más los necesita.

EL NIÑO LEO

     ¿Te acuerdas de aquel juego que solías jugar de niño, que se llamaba sigamos al líder ¿Recuerdas a aquel pequeño que se enfurruñaba cada vez que no conseguía ser el líder? Si era el mismo  chico que te prestaba dinero para comprar golosinas cuando tú ya te habías gastado el tuyo, entonces es seguro que había un Leo en tu pandilla del barrio.
      El típico niño Leo es alegre, risueño y juguetón cuando se sale con la suya. Cuando no, no se sabe de dónde aparecen nubes de tormenta, acompañadas de un rugir de truenos o de un ofendido y caviloso retraimiento. Aunque parezca que se concede demasiada importancia, no hay que poner en su lugar a un niño Leo. Si se reprime su entusiasmo y su alta opinión de sí mismo se corre el riesgo de dejarle profundas cicatrices que durante años oscurecerán el brillo de su Sol. Los niños y las niñas de este signo tienen la costumbre de ser mandones con los demás niños, cosa que a menudo molesta a las madres de otros niños más inhibidos; pero es necesario imponerles suavemente las restricciones necesarias, sin reñirles jamás con aspereza en presencia de sus compañeros de juego. El gran orgullo de Leo reacciona con violencia ante un ataque a su vanidad, y muy especialmente si se produce en público.
     Es bueno estimular la natural capacidad de liderazgo de los niños Leo, pero es menester enseñarles que a cada uno debe tener su turno, y que eso es lo justo, aunque ellos sean más fuertes que los demás.
     El sentido leonino de la justicia hará, por lo general, que los niños vean lo que se intenta esplicarles. Leo no es agresivo por maldad; simplemente, tiene una tendencia innata a encabezar el desfile. Son niños con gran necesidad de exhibirsee, y si cuando son pequeños no se controla esta necesidad, es muy difícil dominarla después. El pequeño leon es el que orgullosamente se pone cabeza abajo en el patio de la escuela o camina por lo alto de una cerca para fascinar a las chicas. Los padres prudentes empiezan desde muy pronto a hacer que el niño Leo se dé cuenta de que, en realidad, ese tipo de exhibicionismo no tiene dignidad alguna. Este sistema da resultados, normalmente, de manera casi mágica, ya que los niños regidos por el Sol tienen un innato sentido de la dignidad.
     Lo notaréis incluso en los más pequeñines: una especie de porte regio que produce la impresión de que el bebé fuera el monarca de todo lo que le rodea. La expresión "Su majestad el bebé"debe haber sido acuñada para escribir a un pequeño Leo. Para un bebé Leo es natural que sus embobados padres y amigos embelesados le reindan homenaje, mientras él acepta graciosamente sus atenciones, presentes y tributos. Le resulta muy fácil dejarse adorar.
     Tu hijo Leeo será más inquieto que la mayoría de los niños, correrá más riesgos y será más activo., También tendrá sus ataques periódicos de leonina haraganería, durante los cuales estará tirado por la casa, demasiado cansado para mover un dedo, como no sea para ordenarte que le atiendas. Déjale solo y hazle entender que nadie es su sirviente. Si quiere algo, puede buscárselo él solo, cuando recupere sus energíaa. Si no actuas así malcriarás al pequeño Leo y harás de él un pequeño tirano. Claro que de vez en cuando no le hará mal que le alcances un libro, le sirvas un vaso de leche con cacao o le hagas amistosamente cualquier pequeño favor. Si se les enseña a respetar los derechos de los demás de la misma manera que se respetan los suyos, los niños Leo pueden ser encantadores para convivir con ellos. Son juquetones y afectuosos como esos adorables cachorritos que se ven en el zoo y, como ellos. necesitan una disciplina estricta y cariñosa.
     Hay dos tipos de niños y niñas Leo. El primer tipo lo forman los extravertidos, alegres, divertidos, bien dispuestos, cálidos y generosos, aunque a veces un poco agresivos. Los otros son más tranquilos, casi tímidos en la superficie. Esos pequeños leones un poco vergonzosos exteriormente pueden haber sufrido un grave golpe en su vanidad, ya sea porque los padres son demasiado dominantes o porque prestan excesiva atención a sus hermanos y hermanas. Secretamente, son niños que necesitan poder y aplauso, tanto como los demas. El peligro de tales situaciones, si se prolongan, es que el niño Leo llegue a obtener la atención que necesita más tarde en su vida, forzando situaciones en mal momento y con la gente más inadecuada, o bien que se retraiga en una dolorosa timidez y una frustración destructiva. La antinatural frustracion de su ego durante largos períodos puede resultarles muy enfermiza.
     Los maestros pueden esperar cierta ayuda de los niños Leo. Les encanta explicar cosas a los demás, y nada les gusta más que sustituir al maestro cuando éste tiene que salir del aula: así ocupan el centro de la escena. Normalmente, el niño Leo que queda a cargo de su clase se ocupará alegremente de la disciplina, pero alguna vez su espíritu juguetón pasará a primer plano, y es posible que al regresar, el maestro encuentre que la clase se ha convertido en un circo de tres pistas.
     Son niños que pueden aprender muy deprisa, cuando quieren. Con frecuencia son muy gratificantes para el maaestro que tiene paciencia con ellos, pero tienen tendencia a mostrarse un poco ociosos en el aprendizaje. Prefieren confiar en su personalidad alegre y congraciarse con su encanto. son capaces de deslumbrar a los maestros con sus sonrisas soleadas y sus zalamerías. Es posible que haya que obligarles a formarse buenos hábitos de estudio, aunque, pensándolo bien, con estos niños lo de obligar es una pérdida de tiempo. La manera más fácil de conseguir que un estudiante Leo obtenga buenas notas es apelar a su vanidad, hacer que quiera ser superior a los otros. Generalmente, es el recurso más eficaz. Cuando se porte bien, dale palmadas en el hombro para asegurárselo, pero no te limites a una sola palmadita. Por más homenajes que se le rindan, Leo siempre está ávido de más.
     Estos chicos necesitarán, problamente, más dinero para sus gastos que otros niños más austeros. Es posible que tu hijo Leo regale las monedas que le sobren, pero no saldrá perdiendo tampoco.
     A medida que crezcan, los jóvenes regidos por el Sol se darán cuenta de la existencia del sexo opuesto mucho antes que los nacidos bajo otros signos solares. Prepárate para una adolescencia turbulenta, porque tu hijo Leo tendrá cien altibajos emocionales por día. Tanto sus amistades como sus romances serán tremendamente dramáticos, plenos de momentos de éxtasis y de corazones destrozados.. A todos los chicos de este signo les encantan las fiestas. Dale la suficiente libertad, porque si no, él se la tomará. Imponiéndole órdenes rígidas destruirás su orgullo y su dignidad. Si estimulas su valor y halagas el yo de un joven Leo, diciéndole con sinceridad que le consideras capaz de serlo, te mostrará orgullosamente lo fuerte que es.
     Nunca es tarea fácil criar a un niño Leo. Pero es posible lograrlo, si recuerda que necesita una disciplina suave y constante, y que el amor y el afecto son las llaves mágicas para abrir su corazón de oro. No son los leones que se sintieron adorados de niños los que se convierten en adultos desdichados, sino los cachorritos que crecieron en el descuido y la privación emocional. Recuerda que, aunque finja ser muy bravo, el temor secreto de Leo es no serlo lo bastante. Abrázale con fuerza todas las noches, y ámale con todo tu corazón
    

EL NIÑO CANCER

     El estado de ánimo de tu bebé Cáncer cambiará con tanta frecuencia como tú le cambias los pañales. Lo que experimenta, ya no le abandona. Cuando sea viejo y de pelo gris, tu hijo Cáncer recordará hasta el último sentimiento y emoción, y podrá dar una imagen exacta de él.
     Desde que desayuna hasta que se acuesta por la noche, la mente del niño Cáncer estará ocupada registrando lo que ve y lo que oye. Para los adultos es difícil seguirle cuando trepa a la montaña lunar de sus sueños, o acompañarlo mientras vadea las corrientes de su imaginación luminosa. Sus emociones son intensas, coloridas y variadas, pero pese a todo muchas veces es un solitario.
     Jugar con los bebés lunares puede ser divertidísimo. Son criaturas muy graciosas, de expresión extraña y ojos que hablan por sí solos. Sus facciones se mueven constantemente por efecto de la risa, la sonrisa o las lágrimas. Es interesante observar esas expresiones elásticas, pero más de una vez desearás que fuera más fácil saber cuándo se reirá y cuándo se quedará mirando con esa mirada lejana mientras escucha la extraña música que oyen todos los niños lunares.
     Son niños con muchas mas necesidades emocionales que cualquier otro signo. Desde la infancia hasta la adolescencia, los Cangrejitos se muestran tremendamente dependientes de las reacciones de sus padres y hermanos. Es posible que tu hijo lunar sea demasiado tímido para expresar sus verdaderos deseos, pero en secreto quiere que le atiendan, le mimen y le adoren. Si en su familia y sus amigos no encuentra la atención y la aprobación que necesita, el rechazo puede aplastarlo, simplemente.
     Aunque durante la adolescencia tus pequeños Cangrejos puedan ser durante un tiempo rebeldes sin causa, por lo general durante los primeros años son fáciles de manejar y de corregir.Como para el Cangrejo su vida interior es muy real, puede estar feliz jugando solo durante horas. Hasta es posible que tenga un compañero de juegos invisible. A veces estos compañeros desaparecerán durante semanas enteras, pero regresarán tan pronto como un compinche del vecindario o un compañero de la escuela hieran los delicados sentimientos lunares o se muestren demasiado prepotentes con el niño lunar. Dócil y tranquilo como son la mayoría de los de su signo, Cáncer es un signo solar de conductores. Pese a la ternura de sus emociones y a la suavidad de sus modales, no sirven para secuaces. Hay en ellos mucho individualismo e independencia de pensamiento.
     Si tu niño sigue la tendencia de la mayor parte de los niños de Cáncer, se saldrá con la suya y será un poco malcriado en lo superficial. Sabe que el que no llora no mama, y es capaz de ponerse bastante lacrimoso cuando no le hacen caso o le tratan con aspereza. Un niño lunar puede inundar la  habitación con ríos de llanto; es como si alguien hubiera dejado abiertos los grifos de la cocina. Y si con toda esa humedad  no sonsigue la ternura y la simpatía que necesita, el Cangrejito se convertirá en un hombre o en una mujer de corazón árido y ojos secos, incapaz de dar ni de recibir fácilmente amor, ávido de soledad, capaz de forjar muy pocos vínculos cálidos.
     Cuando tienes a tu cargo un Cangrejito sensible, es realmente urgente saber reír y llorar con él, y calmar sus miedos, de los que estará demasiado provisto. Posiblemente tu niño lunar no reúna todos los miedos de la lista, pero descuida, que tendrá unos cuantos.
     Son niños que necesitan mucha empatía emocional para desarrollar sus bellas cualidades artísticas y creativas. Si no les falta durante sus años formativos, eso les ayudará a convertirse en adultos pacientes, generosos, serenamente seguros de sí mismos y de corazón abierto. Si se ven privados de una atenta comprensión, su ternura y suavidad naturales pueden deformarse, convirtiéndose en autocompasión y en constante cavilación, amarga y silenciosa. El miedo, a menos que se le haga frente desde temprano, puede convertirse en prejuicio ilógico y en odio. Los Cangrejos que se han visto impedidos en su desarrollo emocional suelen convertirse en seres desconfiados, a menudo vengativos e incluso suicidas. En el mejor de los casos, esos hombres y mujeres lunáticos y desdichados llevan una vida triste y monótona, a menos aue tomen la dramática decisión de dedicarse a levantar un imperio financiero o a desarrolar un talento latente. Cualquiera de ambas cosas puede sustituir misericordiosamente el amor y el afecto que faltaron al tierno corazón lunar en el momento en que era más vulnerable: en la niñez.
     Nunca se insistirá demasiado en que estos niños tan sensibles pueden imaginarse injurias o agravios, e imaginar un rechazo que jamás existió. Hay que tener especial cuidado en convencerlos de que son buenos, inteligentes, bonitos, despiertos, de que se les ama y se está contento de ellos. Muchos padres lo intuyen, y por eso son tantos los Cangrejitos tan mimados en su casa que se quedan atónitos de adultos, al comprobar que el mundo se desinteresa bastante fríamente de sus deseos personales. No es de admirarse que tantos Cáncer recuerden afectuosamente a mamá y le erijan poco menos que un santuario a medida que se hacen mayores. Nadie más, nunca, cuidará tanto de ellos. Con un niño lunar, la cuestión es siempre no ser demasiado firme y deformarlo, ni demasiado tolerante y malcriarlo. Encontrar el punto medio nunca es fácil. La clave es relajarse. El amor sabe por lo general encontrar el camino.
     Es posible que algunas veces los maestros de jóvenes lunares se quejen de que son testarudos o de que sueñan despiertos, pero habitualmente ninguno de estos fallos es lo bastante pronunciado como para constituirse en un verdadero problema. Es posible que haya cierta exageración: el chico puede contar cómo le atacó un oso en el bosque para explicar los rasguños que se hizo al caerse por los escalones del porche.,La niña puede referir una patética historia de padres crueles que la mandan a la cama sin cenar, cuando todo se ha reducido a una discusión familiar de las más comunes. Pero cabe esperar algunas historias fantasiosas cuando se piensa en la fuerte impresión mental provovada por la lectura de relatos de aventuras sobre la imaginación lunar. Cuando su corazón está realmentae dolorido, en lugar de hacer de ello una tragedia ficticia, el niño Cáncer típico tenderá normalmente a quedarse callado y a negarse a hablar del asunto.
     La mayoria de los jóvenes cangrejos esperan con ansiedad poder tener un trabajo pagado, y andarán por el barrio en busca de pequeñas tareas para hacer y haran tintinear alguna moneda en sus bolsillos. De todo lo que gane llevará una perfecta contabilidad, y ahorrará una buena parte. Después de un tiempo, quizá tú también empieces a ahorrar un poco de su asignación semanal. Probablemente él se gane el dinero para sus gastos antes que otros niños, y se enorgullecerá de ello. En muchos sentidos, encontrarás que económicamente te hace la vida más fácil. Son jóvenes que muchas veces trabajan mientras hacen sus estudios universitarios.
     El niño Cáncer te divertirá con sus bromas y su risa contagiosa. Puede hacer caras tan graciosas como máscaras de Carnaval, y es capaz de ver el humor en los diversos aspectos del desfile de motivos humanos. Se interesará tiernamente por los familiares enfermos, por los problemas económicos de la familia y por las dificultades de amigos y vecinos. Los jóvenes regidos por la Luna se entusiasmasn por las historias de héroes que afrontaron tremendas dificultades para alcanzar grandes hazañas, y son especialmente tiernos y compasivos con los animales. Pero si ellos mismos se sienten maltratados, es posible que transfieran esa crueldad, descargándola en seres más pequeños, siguiendo así la proyección iniciada con ellos por los adultos. Los jóvenes Cangrejos pueden mostrarse realmente muy malhumorados, pero son estados de ánimo que rara vez duran más de unas horas sin ceder el paso a una encantadora sonrisa lunática.
    Es posible que te preguntes que pasara cuando tu niño Cancer se haya ido del hogar. La casa estará entonces silenciosa y faltará en ella la alternancia de sus risas y sus lágrimas, después que el cangrejito, gracioso e imaginativo, se haya ido a formar su propia familia. ¿Se olvidará?  Podran pasar los años, y él podrá navegar por mares lejanos, pero tú puedes guardarle sobre la cómoda su alcancía, la que te dio aquel sábado que reñisteis. Y a ella, tenle siempre la muñeca de trapo en la butaca junto a la ventana. A lo largo de los dias, tu niño lunar volverá muchas veces a casa, en busca de viejos recuerdos y para retornar al pasado. No importa cuántos kilómetros le separen del ayer, en cualquier lugar donde viva siempre está cerca de casa. Mantén provista la lata de bizcochos.

EL NIÑO GEMINIS

     Si tienes un bebe Geminis, piensa que durante los próximos quince o veinte años tendrás que ser rápido y estar alerta, y mas vale eque empieces ahora, mientras tu niños todaviía está inmovilizada en su cuna. No tardará mucho en aprender a andar y a hablar. Si no te preparas para volar junto con él, es posible que se te escape de entre los dedos como una burbuja de aire. Tan pronto como empiece a gatear, juraras que acababas de verle metiendo la mano dentro de la batidora eléctrica, en la despensa. Pero, ¿cómo podía ser? Si ahí está, en el porche de delante de la casa, comiéndose angelicalmente las petunias. ¿Cómo puede estar en dos lugares al mismo tiempo? Recuerda que tu niño está regido por Mercurio. Es aquel dios griego a qluien se ve representado en los libros, con alas en los pies y un brillante casco plateado. A modo de casco, pon una cacerola en la cabeza de tu bebé Géminis, y usa la imaginación para ver las alas que brotan de esos tobillos rosados y regordetes. ¿Ves ahora cómo se parecen?
     Como és tan activo, si lo sacas a un parque, tiene que ser uno bien grande, que le permita sentirse libre, buscar y explorar. Demasiada restricción y obstrucción de la libertad pueden provocar en geminis una depresión emocional nada fácil de superar. Recuerda que Géminis es un signo de aire, y que el aire debe moverse. Cuando tengas que mantenerlo encerrado, asegúrate de que tenga juguetes muy diversos y muchos libros de brillantes colores para mirar.
     Claro que una vez que se sienta aburrido no permanecerá mucho tiempo allí. Mercurio rige las cuerdas vocales, y cuando tu pequeño Géminis decida desplegar esos talentos, te parecerá increíble que tanto ruido pueda salir de una sola boquita.
     Es frecuente que los niños Géminis pongan nerviosa a la gente mayor, que es más plácida, con sus rápidos movimientos de pájaro. Los mayores siempre están diciendo al pequeño Géminis que deje de molestar, o que tenga paciencia y haga una sola cosa a la vez. Pero para estos niños, hacer dos cosas a la vez es lo natural. Lo que para la gente pesada o reposada es molestar, para Mercurio no es más que su estado normal de actividad. Debemos tratar de recordar que el activo pequeño geminis que molesta a sus mayores, mas introvertidos, no hace otra cosa que ser él mismo. Bastante difícil es ser uno mismo, sin que nadie trate de imponerle a uno un cambio de personalidad.
     Ama a tu hijo Géminis tal como es: una personita amistosa, despierta, inquisitiva y precoz. A una libélula no puedes convertirla en caracol, y viceversa. Tampoco el leopardo puede borrarse las manchas, y cabe agregar que si alguien se empeñara en quitárselas, podría terminar siendo un leopardo desdichado y neurótico.
     Deja tranquilas esas manchas de dualidad que encuentras en tu Géminis. Algún día te enorgullecerás de algún edificio que proyectó y de algún premio literario que ganó, y cuando ponga de manifiesto su duplicidad de talentos, te preguntarás asombrada por qué querías reducirle a un único molde. Es posible que su mente de libelula os confunda, pero recordad que Géminis corre en pos de mil fantasías, decidiento cuál ha de destacar y con cuál ha de quedarse.
     Por lo general, los maestros se darán cuenta en seguida de que estos niños, no tienen problemas para aprender a leer. Géminis es poco menos que el inventor de las palabras. Son niños a quienes no les molestará que les pidan que reciten, y es posible que, mientras el resto de la clase suspira, ellos sonrían cuando se asigna un tema. Para ellos es un placer comunicarse con otros y compartir sus conocimientos, ya sea verbalmente o por escrito. Muchos muestran inclinación por la mecánica. Es posible que se muerda las uñas, pero normalmente es de dedos delgados y flexibles, y le resulta fácil hacer trucos de prestidigitación y tocar instrumentos musicales. Su habilidad puede hacer de él un excelente cirujano, dentista o relojero. Las manos de Géminis son sensibles, expresivas y hábiles.
     Tiene por lo general una notable capacidad para la imitación, y su agudo sentido del ingenio y de la crítica se muestra desde muy temprano. En casa o en la escuela, el niño Géminis vive en un mundo de ficción y de realidad que constantemente se entremezclan, donde la verdad se presenta con frecuencia como fantasía y la fantasía se disfraza de verdad. Es posible que dé la impresión de exagerar y hasta de mentir pero, simplemente, no puede dejar de poner unas notas de color cuando relata un incidente, y es frecuente que él mismo se convenza de que sucedió de esa manera. En esos momentos hay que tratarle con suavidad, porque lo que hace en realidad es ensanchar y efercitar su vívida imaginación. Mas que hacerle sentir culpable por tener tanta imaginación se le debe aconsejar que diga siempre la verdad y que el cuento lo narre por escrito. Una vez haya aprendido está técnica, será capaz de ver la diferencia entre sueños y hechos, en vez de quedarse perdido en algún rincón entre los dos mundos. Las criaturas Géminis a quienes no se les permite expresarse y comunicarse con naturalidad pueden, a manera de autodefensa, retirarse a un mundo parcial de ilusión. Es buena idea hacerles aprender idiomas desde pequeños, ya que probablemente los aprrenderán sin esfuerzo. Géminis jamás se satisface con una sola actividad a la vez. Es como si tuvieran que vivir dos vidas en el tiempo que les ha sido asignado, de modo que tienen que absorber todo lo que pueden, y con la máxima rapidez posible. Los principales peligros son la falta de paciencia y la escasa disposición a persistir en el esfuerzo hasta aprender verdaderamente algo. Son niños en quienes hay que combatir la tendencia a dejar que la rapidez del intelecto y la volubilidad del ingenio los paseen por la superficie del conocimiento, sin profundizar.
     A los niños Géminis puede resultarles difícil ser puntuales, porque a cualquier parte que vayan siempre se encontrarán con algo nuevo. Es posible que también les sea difícil escuchar sin interrumpir, porque captan instantáneamente la idea y no les interesa oír los detalles. A veces el mercuriano tiende a repetirse, pero no permitirá que los demás lo hagan y eso, naturalmente, puede irritar a la gente. En clase, una mosca, un trozo de papel de colores o un hilo de humo que se ve por la ventana pueden distraerle. Ganar su atención nunca es fácil, pero cuando lo hayas conseguido encontrarás recompensa en la decidida curiosidad de Géminis, y te sentirás halagado por su interés.
      En la adolescencia, los varones Géminis vivirán prácticamente pegados al teléfono, saldrán con una persona diferente cada semana, cambiarán cien veces de idea respecto de su futura carrera, conducirán el coche un poco demasiado rápido, meterán mano en el motor y ta arreglarán la lavadora. Las chicas serán populares, y tan pronto se las verá en un diuvio de lágrimas como con una radiante sonrisa. Son chicos que te harán vivir con el alma en un hilo, pero te mantendrán joven.

EL NIÑO TAURO

                                                                                                                                                                             

Los bebés Tauro son una delicia para criarlos. Los padres de niñas y varones nacidos bajo este signo comprobarán que sus hijos son mimosos y tiernos. Les encanta que les tomen en brazos, les abracen y les acaricien. Con su rizo en la frente, el torito se te subirá de un salto a las rodillas para que le beses y te dejará sin aliento con sus abrazos de oso. A tus amigos, si confía en ellos, los tratará con el mismo afecto. La pequeña Tauro hará gestos de coquetería desde su sillita alta para que le sirvan una ración más de postre. Probablemente, será la nenita de papá, a quien se le hará difícil resistirse al límpido encanto de su hija... tan difícil como se le hace a mamá acorazarse contra la tranquila dulzura de su hijito Tauro.
    Ya de pequeñitos, los niños Tauro parecen, en general, más competentes que otros chicos. Para empezar, son emocionalmente estables y rara vez sufren accesos de depresión, momentos de impulsividad o tendencias exhibicionistas. Pueden ser rechazantes y obstinados, a veces mostrarse tímidos, pero en ellos no son comunes las alteraciones y dolores normales del crecimiento. La disposición de Tauro es normalmente serena y placentera. No se inquietan ni molestan fácilmente. Salvo cuando se rebelan porque se les exige demasiado, son personas tranquilas, alegres y nada imprevisibles. En ellos hay una madurez de la que carecen los niños nacidos bajo otros signos solares (excepción hecha de Capricornio y de Escorpio). Incluso los toritos muy pequeños suelen portarse muy bien cuando hay extraños, pero si les obligas a convertirse en centro de la atención se quedarán como si el gato les hubiera comido la lengua. Déjalos que jueguen en paz en un rincón, y lo más probable es que las visitas se queden impresionadas por lo bien educados que están.
    Un niño Tauro se ocupa tranquilamente de sus cosas, y cuando sea mayorcito, será raro que te incomode con actitudes groseras o de petulancia. Sin embargo, si pones a prueba su buen genio fastidiándole (eso no lo soporta), presionándole o exigiéndole que haga algo que él está decidido a no hacer, puede volverse belicoso. La única manera de afrontar ese desafío es el amor, jamás la fuerza. Un niño Tauro a quien los mayores hayan forzado demasiado puede convertirse en un adulto callado, sombrío y cruel. Recuerda que para Tauro es imposible mantener su obstinación ante las demostraciones físicas de afecto. Un abrazo afectuoso, un beso grande y amistoso y una alegre sonrisa le inducirán a salir de su obstinación. Háblale siempre con suavidad y con lógica. Los gritos y las órdenes formuladas con aspereza sólo conseguirán que cierre los ojos y se tape los oídos. Es capaz de resistirse a la disciplina y a las órdenes hasta el día del juicio, pero al afecto, ni un minuto.
    Aunque sea aún muy pequeño, estará lleno de sentido común. Si algo le parece razonable, lo hará, pero quiere una explicación práctica. Nada complicado: simplemente la verdad, sinceramente y sin barnices. Con decirle "Tienes que ir a acostarte ahora porque yo lo digo" no irás a ninguna parte. Para él, eso no es sensato ni razonable. En cambio, es probable que darle suavemente una explicación como "Ahora tienes que irte a la cama porque ya vamos a apagar las luces, y si no te acuestas, mañana no podrás salir a jugar porque estarás demasiado cansado" le decida a meterse entre las sábanas y disponerse a dormir. También puedes decirle: "Ahora métete en la cama calentita, con las sábanas limpitas y planchadas, que yo te arroparé con tu  manta, tan suave, y te leeré  un cuento". Por testarudo que se haya mostrado hasta ese momento, es casi seguro que estas palabras le convertirán en un ángel de docilidad. Como es de naturaleza muy sensual, es raro que la descripción de sensaciones no le haga vibrar una cuerda sensible. Forzarle para que haga lo que se le pide, en cambio, es tan inútil como peligroso para su personalidad futura.
    Los colores y los sonidos también afectarán profundamente a su disposición y sus emociones. Adornar su habitación con colores rojos y naranjas vivos y detonantes le pondrá inquieto y obstinado. Los tonos pastel, sobre todo los rosados y todos los tonos de azul, tendrán en él efectos casi mágicos. Son niños que reaccionan visiblemente a los colores. Si éstos armonizan con las vibraciones propias de su signo, se mantendrán tranquilos; si son discordantes puede, sin exageración, lesionar su estabilidad emocional. El mismo efecto tendrán los ruidos fuertes y destemplados.

    Generalmente, los maestros encuentran que el niño Tauro es uno de los más trabajadores de la clase. A menos que haya posiciones planetarias desfavorables en su carta, los niños Tauro serán trabajadores en la escuela, aprenderán metodicamente sus lecciones y tendrán una notable capacidad de concentracion. El niño Tauro es muy obediente por lo general. Su mente trabaja en forma algo lenta, pero jamás se olvida de lo que aprendió, una vez que ha retenido un hecho o una fecha. Son chicos que por lo general superan bien los exámenes, porque se preparan escrupulosamente para ellos. Suelen ser elegidos líderes para las actividades de grupo, debido a su respeto por el juego limpio, y también a su evidente sentido común y buen juicio.
    Es posible que la obstinación de su hijo haga pasar algunos malos ratos a los padres de un niño Tauro, pero no serán muchos ni muy frecuentes. La madre de un niño Tauro llevo un día a su hijo a la escuela y se arrepintio de no haberse quedado en casa tranquilamente. El niño había ofendido a su maestra, declarando que lo que ella decía estaba mal. Por supuesto, el autor del libro de texto también estaba equivocado.
    Al dia siguientae, su madre le llevó junto a la maestra ordenándole con firmeza que le pidiera disculpas. A mediodia, en le despacho del director, se oyó a la madre que repetia debilmente "Pídele disculpas a la señorita". A última hora, cuando ya los alumnos se habían ido su madre aún seguia intentandolo. Había sido más fuerte que la madre, la maestra y el director. Jamás se disculpó.
    Cria a tu niño Tauro en una atmósfera de amor, hogareña y cálida. Rodéalo de afecto. No le tironees demasiado los cuernos y déjale pastar con el ritmo que él quiera. Llénale los oídos de música y los ojos de belleza, y algún día él te llenará el corazón de paz.  

EL NIÑO ARIES



EL NIÑO ARIES
Mientras papá habla con algún familiar, el bebé Aries vocifera desde su cuna para que le presten atención. Pero, ¿cómo se atreven a ignorarle para charlar con su tía abuela? ¿Quién es el que manda aquí, vamos a ver?
    Sera suficiente con subirle en el taxi al volver del hospital para tener inequívocamente resuelta la cuestión: el que manda es el bebé Aries.¿Es que te quedaba alguna duda? Pues ya se disiparan cuando tenga edad suficiente para sentarse en la sillita alta y empezar a golpear la cuchara contra la bandeja si le dejan demasiado tiempo solo. Jamás te fastidiará ni se pondrá pesado con su alimento preferido. En todo su cuerpecito fuerte, activo, cuadrado de hombros, no hay un solo hueso delicado. El niños Aries escupirá las verduras con la fuerza de un cañonazo, y se frotará el plato de papilla por la minúscula cabecita rapada para dejar bien claro que decididamente, esas no son comidas que le gusten al bebé. Y en su acción las niñas serán tan directas como los varones. ¿Tierna, he dicho? El metal de abril es el hierro, y su piedra el diamante, la sustancia más dura que se conoce.
  Cuando sea un poquito mayor, es posible que te deje sin aliento con sus afectuosos abrazos de oso. Generalmente, los niños de Aries son cariñosos y demostrativos, excepto aquellos cuyas primeras experiencias emocionales enfrían un corazón normalmente cálido. Son las ovejitas, tristes y calladas. Pero sus cuernos son igualmente peligrosos.
   A medida que crezca y se haga más fuerte, tras haber luchado contra el sarampión, las paperas, la varicela y la escarlatina, venciendo a todas sin dificultades, el niño de Aries empezará a mostrar su pauta temperamental. Sus padres advertirán que puede comportarse como una criatura totalmente irrazonable si se le lleva la contraria, pero su enojo no es duradero. Tras una explosión periódica, el pequeño o la niñita de Aries os brindarán una amplia y radiante sonrisa de triunfo.
    Aries comparte con asombrosa generosidad sus juguetes con sus padres, sus compañeros de juego, el cartero, el bulldog del vecino y el gato de la calle. Sin embargo, su generosidad se acabará si alguno de ellos hiere sus sentimientos o se interpone en el camino de algo que él quiere hacer o del lugar donde quiere llegar. Entonces, cuidado con los estallidos.
     Tanto los varones como las niñas Aries pueden caer precozmente en el hábito de descuidar sus deberes escolares, y poco les impresionará que su madre le ponga como ejemplo a un hermanito más obediente. En vez de avergonzar al joven marciano para que estudie, hay que desafiarlo. Se relamerá con un desafío de la misma manera que su gato favorito se relame con la nata. Basta con decirle que probablemente él o ella sea un poco lento, no tan inteligente como los demás, un poco inferior, vamos, veréis como vuela el polvo de esos libros de texto, cuando el carnerito se dispone a demostrar la ridiculez de esa teoría. ¿Que alguien pueda estar por encima de él? Eso está por verse.
     Tu niño tendrá imaginación vivaz; será soñador y sentimental como un libro de cuentos, pero al mismo tiempo, no tendrá inconveniente en tostarse el pan. Si existe una cosa tan contradictoria como un soñador idealista, duro y práctico, ese es tu ojo de Aries, tan ingenuo como tenaz, tan suave como persistente. Todos esos rasgos conflictivos están entretejidos en su naturaleza orgullosa, que asombrará y te dejará intrigado. Lo mismo les pasará más adelante a tus amigos, y no hablemos del jefe, sus futuros enemigos y el alma desprevenida con la que se case.
    Un pequeño Aries a quien no se le enseña a obedecer cuando es pequeño tendrá que aprender algunas terribles lecciones en la madurez. No olvidéis que su corazón es blando como la mantequilla, y que en él se ocultan hondamente arraigados temores de que él no le gusta a nadie y nadie le quiere, a pesar de su aparente valentía. Si ve que se rechazan sus sueños o se enfría su entusiasmo puede volver corriendo a esconder entre tus brazos las lágrimas de su tragedia. Cuando esto suceda, abrázalo muy fuerte, porque su corazón estará destrozado. Con sus modales ásperos y dominantes, el idealismo de Aries es sensible, y el menor golpe lo magulla. 
    Los regalos de cumpleaños, escóndelos en un lugar seguro, porque Aries es impaciente y no está dispuesto a esperar a que le descubran las sorpresas. 
    No hay que darle ordenes, sino pedirle siempre con una sonrisa que haga las cosas, y se esforzará por complacer a sus padres. Jamás destruyas su confianza, que es tan importante para él como el aire que respira.
    Frecuentar a gente fría y rechazante puede herirlo profundamente, pero nada conseguirá doblegar su espíritu. Probablemente enloquezca por los libros y sea un lector insaciable, pero no te extrañe que no esté muy dispuesto a aceptar años de disciplina adicional de una educación superior, que ayudará a su mente aéseguir el ritmo de sus ardientes emociones y de sus súbitos y enigmáticos chispazos de penetrante intuición. Cuanto más se resista a la idea de un rígido programa académico, cuanto más inclinado se sienta hacia la libertad de probar algún trabajo, más seguro puedes estar de que necesita un horario y un programa.
     Tendrá que aprender lo que es responsabilidad, pero eso y otras cosas, se le enseñarán más rápidamente acudiendo a una lógica directa y a un sincero afecto. Son dos cosas que le llegan. Padres y maestros deberían recordar siempre que los niños de Aries florecen gracias al elogio, que les lleva a perseguir obstinadamente con su esfuerzo, pero estallan como un cohete cuando se les ataca, y pierden entonces todo interés por superarse. Dile qué es lo que te gusta en él, y así nunca hará lo que no te gusta. El joven Aries rinde exactamente lo que se espera de él, incluso aquel que oculta el ardor de sus impulsos bajo una personalidad serena. Es un niño a quien hay que mantener siempre ocupado para no tener complicaciones. La ociosidad atrae al peligro. Necesita, además gran número de horas de sueño para recuperar toda la energía que  dispersa y dilapida. 
       Le encantará que le cuenten cuentos sobre héroes valientes que conquistan mundos nuevos. Pero también cree en los duendes y en el pozo de los deseos, y seguirá creyendo en ellos mucho después de que ya le estén pequeños los zapatitos con los que aprendió a caminar, y de que os haya dado el primer nieto. Si sus padres le conducen con suavidad y amor constante, el niños de Marte crecerá con el maravilloso poder de soñar sueños imposibles... y hacer que se conviertan en realidad.
   

LOS NIÑOS Y SUS SIGNOS DEL ZODIACO

Seguro que os gustaria saber mas sobre vuestros hijos. A continuación os expongo los 12 signos del zodiaco cuando son niños. Espero que os ayude en vuestra tarea de educarlos. Empezaré por el niño Aries, e iré añadiendo los demás signos.